En el monte

Integral de La Pedriza (dic2012)
Corriendo por el monte.

El uno de diciembre me fui a La Pedri acompañado de mi amigo Javi. Ibamos con la intención de hacernos corriendo el recorrido del Cross de La Pedriza. Recorrido largo y duro que sube desde Cantocochino al Yelmo y de allí a Las Torres de La Pedriza, pasando por el Collado de La Dehesilla, para luego descender desde el collado Carabina hasta el aparcamiento.

 En la subida desde el Collado La Dehesilla, empezamos a encontrarnos nieve, no había mucha, pero en algunos sitios tenías que pisar con cuidado para no hundir el pie y llenarte la zapatilla de nieve, Javi iba con zapatillas de correr sin membrana, por lo que llegó al final de la jornada con los pies mojados.
Aquí a la izquierda al final de la dura subida desde La Dehesilla, en la que en algunos momentos hay que echar las manos para ir progresando.


Bonita foto con la cumbre de La Maliciosa al fondo
 El día, aunque soleado, era un poco frio, con bastante viento en las zonas más altas de la ruta.
Todas las subidas las hicimos andando a ritmo alto, y corriamos en el resto del camino.
Cuando bajamos hacia el Collado La Dehesilla, nos encontramos un grupo muy numeroso de senderistas, que al cruzarse con nosotros y ver como bajábamos corriendo, se paraban y nos miraban un poco alucinados de nuestra locura.
No eramos los únicos que corriamos por las piedras.
Lo cierto es que es un descenso bastante accidentado y con bastante inclinación, por lo que hay que extremar la precaución y no lanzarse a lo loco, por que las caidas pueden ser peligrosas.

En Las Torres.

 Después de llegar a Las Torres, perdemos altura hacia el Collado Carabina, para desde allí, comenzar la larga y vertiginosa bajada hacia Cantocochino.
Pasas más de una hora bajando, en una bonita bajada atravesando el bosque por un camino que hace continuas zetas, y que posteriormente suaviza un poco su pendiente, y continua a la vera de un arroyo, para luego salir a terreno más abierto con grandes rocas y enlazar poco después con la autopista de La Pedriza, dejando el Refugio Giner, arriba a la izquierda y llegar 15 minutos después al aparcamiento.
Esta vez no ibamos a subir al Collado del Cabrón,Javi se había caido tras escurrirse en una laja de piedra empapada por el agua, en la caida se hizo daño en una rodilla, así que decidimos acortar la ruta, e ir directamente al aparcamiento.
Además era hora de regresar a Madrid, a Javi le esperaban para comer. Habían sido más de tres horas de actividad.









Las Canales Oscuras de Gredos.

El 15 de octubre de 2010, mi hermano Antonio y mis amigos Javi y Carlos Maravillas (Yiyo), nos echamos a la carretera rumbo a Madrigal de la Vera. Allí nos dirigíamos con la intención de, al dia siguiente, subir al Pico Almanzor, por la vertiente sur, las espectaculares Canales Oscuras de Gredos.
Desde Madrigal tomamos, pasado el poblado celta, una pista en muy mal estado, (pobre Picasso), que nos ahorraba unos kilómetros de pesada caminata.
Dormimos al lado del coche, con unas inmejorables vistas sobre Madrigal. Nos hizo buena noche, así que dormimos muy a gusto y felices contemplando el cielo estrellado, hasta teníamos almohadas, que llevaba en el coche, lo dicho, un lujo, mejor que en un hotel.
A la mañana siguiente, madrugamos y enseguida nos pusimos en marcha, nos esperaba una larga y dura subida.



Con algún problemilla al principio para seguir la ruta, fuimos acercándonos hacia Las Canales, impresionantes vistas desde aquí. La subida la íbamos a hacer por el camino del Tío Domingo.




 Fue una subida dura, pero bonita, y tras cuatro horas de ascensión, llegábamos a la Portilla Bermeja, desde la que se contempla una bonita vista del Circo de Gredos, con la Laguna al fondo, y sobre ella la cumbre del Morezón, y los Tres Hermanitos más a la derecha.
Tras un descanso, dirigimos nuestros pasos hacia el Almanzor, progresando por la cresta desde el collado

Javi y yo, en la cresta, ya cerca de la cumbre del Almanzor.
Carlos Maravillas, en la cumbre del Pico Almanzor.



Antonio, "el Guía".
 Descendiendo de la cumbre del Almanzor, nos quedaba una larga y vertiginosa bajada.
 Parece que nos lo estamos pensando un poco. En invierno y con nieve helada, estas canales deben ser terroríficas. ¡Qué miedo!



Peña Chilla.

Llegando al coche, tras casi diez horas de actividad. No ha estado nada mal.

Yiyo, con su mochilon habitual y sin despeinarse.

Un descansito y foto para el recuerdo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario